«Que nadie se confunda, todos vamos a defender la voluntad de nuestros pueblos», afirmó la presidenta Cristina Fernádnez, tras rememorar la estela de golpes de Estado y dictaduras que azotaron a América Latina.
Durante su intervención en el encuentro bilateral con su par boliviano Evo Morales en Cochabamba, la mandataria argentina celebró los «nuevos vientos que corren en América Latina» y agregó: «El desafío es que nuestras sociedades sean protagonistas de esos tiempos», reseñó el diario boliviano Cambio.
Por su parte, el presidente Evo Morales insistió en que la lucha por la defensa de la soberanía regional solo puede ser hecha, «inspirados» en la batalla de los movimientos sociales, «una lucha permanente contra el colonialismo y contra las políticas de dominación».
Fernández advirtió sobre las amenazas que se ciernen sobre la región y destacó el rol del Mercado Común del Sur (Mercosur), de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) para superar la injerencia extranjera.
Morales describió la Celac como la «liberación de los pueblos de América» de la injerencia de Estados Unidos y Canadá.
Al referirse a la crisis estructural que afronta el modelo eocnómico impulsado por el Fondo Monetario Internacional (FMI), la presidenta argentina dijo que «ese mundo se está derrumbando por esas políticas que ya no se pueden llamar neoliberales, sino que pueden ser consideradas como un «anarco capitalismo».
La líder bromeó con el calificativo de «nacionalizadores» con el que la prensa privada describió a ambos mandatarios y sentenció: «Es imposible venir hoy a nuestros países con las técnicas de la Colonia».
AVN
