«Esto es una bendición, poder tener un techo propio para abrigar a mis hijos y a mi esposa», expresó Jorge Bolívar, rodeado de sus pequeños al momento de abrir la puerta de su nuevo hogar.
Este aragüeño tenía 15 años viviendo en situación de riesgo en las faldas de un cerro en la población de San Mateo. Habitaba en casa de su suegra junto a su esposa y sus cuatro hijos.
Desde hoy emprende una nueva etapa de su vida en el sector Negra Matea, donde las Brigadas de Construcción ejecutaron 27 viviendas del Programa de Transformación Integral del Hábitat, con una inversión de 2 millones 109 mil 142 bolívares.
«Ahora estoy en mi propia casa y eso implica mayor compromiso, por eso siento ganas de luchar aún más para salir adelante y darle un mejor futuro a mis pequeñas, que van a crecer en un hogar digno», agregó Bolívar.
Rut Elizabeth García, esposa de Jorge Bolívar, confesó que día a día le pedía con fervor a Dios que le concediera la oportunidad de tener una casa segura para sus hijas.
«El Todopoderoso escuchó mis oraciones y mi clamor. Le pedí con devoción para hacer realidad este sueño que hoy estoy viviendo», agregó.
Este no es el único logro que ha alcanzado esta familia. En 2007 García se graduó de licenciada en Educación Integral en la Universidad Bolivariana de Venezuela (UBV) y su esposo está estudiando en el Programa de Formación en Actividad Física y Salud de la Misión Sucre.
AVN
