Chávez: ¡Bolívar, Bolívar, sigo mirando tu rostro, Padre infinito!

Marcelo García

Palacio de Miraflores, Caracas El presidente Hugo Chávez envió dos mensaje a través de su cuenta @chavezcandanga: «¡Bolívar, Bolívar, sigo mirando tu rostro, Padre infinito! ¡Y parafraseo al gran Neruda: «Ahora todo llevará tu rostro, Padre, en nuestra morada»!!».

Marcelo García

Al cumplirse el aniversario 229 del natalicio del Padre de la Patria, el presidente Chávez develó a Venezuela y al mundo el rostro de Simón Bolívar.

Luego de una labor científica tecnológica realizada por un equipo multidisciplinario, Chávez aseguró: «Ha sido un trabajo maravilloso de los expertos. Un trabajo computarizado en tres dimensiones sobre el cráneo de Bolívar que fue escaneado científicamente».

Asimismo el Presidente dejó un segundo mensaje en su cuenta @chavezcandanga: «¡Aquí les dejo el informe preliminar sobre las causas de la muerte del Libertador!! ¡Viva Bolívar!! http://www.simonbolivar.gob.ve/causas».

El Informe lo realiza un grupo multidisciplinario integrado por expertos del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc); del Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC), del Instituto de Estudios Avanzados (IDEA) y especialistas internacionales que también participan en el proceso de investigación.

Los restos del Libertador fueron exhumados en julio de 2010 por mandato del Tribunal 19º de Control de Caracas. Este a su vez recibió la solicitud del ministerio público, órgano integrante de la comisión presidencial designada en marzo de 2008, a la cual el jefe de Estado le encargó la misión de indagar si esos eran verdaderamente los restos del Padre de la Patria, así como la causa de su muerte.

Yanuacelis Cruz Calcaño, cirujana y miembro del equipo de investigación, informó que ya se han cumplido los estudios detallados del tejido óseo, cumplidas las pruebas histológicas, radiológicas y toxicológicas; resaltó además el uso de  técnicas vanguardistas para corroborar la edad del Libertador al momento de su muerte.

Por: Marvyn Bolívar.

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