El pasado viernes fue anunciado en Caracas el veredicto del Premio Libertador al Pensamiento Crítico 2013, el cual en esta oportunidad recayó por primera vez en una mujer, Marta Harnecker, quien fue galardonada por su obra Un mundo a construir (nuevos caminos).
Harnecker nació en Chile, donde inició a finales de la década de 1960 su actividad política al incorporarse al movimiento estudiantil, de donde parte con derrotero propio a dirigir la formación marxista de obreros y campesinos, experiencia de la que extrae sus trabajos de formación marxista, precisa la página web de la Red de Intelectuales y Artistas en Defensa de la Humanidad.
La socióloga e investigadora dejó Chile luego del golpe de Estado que depuso al presidente socialista Salvador Allende y posteriormente se radicó en Cuba. Se ha dedicado desde entonces a divulgar el pensamiento marxista.
Sus trabajos han sido utilizados por organizaciones obreras y los partidos comunistas para la formación de sus cuadros en la década de 1970 y siguientes, especialmente sus obras Los conceptos elementales del materialismo histórico y Cuadernos de educación popular, detalla el sitio web humanidadenred.org.ve
Recientemente, la autora también ha incorporado en su trabajo intelectual la realización de piezas audiovisuales pedagógicas destinados al estudio individual o colectivo.
La obra ganadora del Premio Libertador es calificada como un nuevo paso en la reflexión que edifica las bases creadoras de un nuevo proyecto político hacia el socialismo, en la que se reivindica una nueva instancia al servicio de los movimientos sociales y propone cuál es el militante y cultura políticas necesarios actualmente.
Harnecker señala en su trabajo las alternativas al sistema capitalista que actualmente existen y cita a Venezuela como un ejemplo de ellas, tal como lo reseña una entrevista a la autora realizada en España por Rafael Fraguas, publicado en el blog dueloliterae.blogspot.com.
«Una amplia plataforma social que interprete políticamente los innumerables malestares sociales que el neoliberalismo provoca y que los ataje con soluciones sociales, compartidas y discutidas a nivel de base, como se ha hecho en Venezuela con los consejos, luego con las comunas», expresa.
Su trabajo ganador del Premio Libertador —el cual consta de 150.000 dólares, una pieza escultórica, diploma y publicación— fue destacado por la «originalidad del pensamiento presentado en la obra, relevancia del contenido para la coyuntura actual y temática significativa como planteamiento crítico y al mismo tiempo propositivo», expresa el veredicto.
El jurado designado por el Ministerio para la Cultura, estuvo integrado por el filósofo italiano Gianni Vattimo; el director de la revista Punto Final de Chile, Manuel Cabieses Donoso; el historiador ecuatoriano Juan Paz y Miño; el arqueólogo y escritor Mario Sanoja; y la doctora en Ciencias Sociales Alba Carosio, quienes se reunieron entre los días 24 y 27 de junio, en Caracas, para analizar 48 obras provenientes de 17 países.
Además fueron otorgados cinco menciones honoríficas para obras destacadas como lo son: El capitalismo contemporáneo, del egipcio Samir Amin; Tratado de métodos de análisis de los sistemas económicos, mundialización capitalista y crisis sistémica, del italiano Luciano Vasapoli.
Asimismo, Fetichismo y poder del pensaminto de Karl Marx, del argentino Néstor Kohan; Los 7 pecados de Hugo Chávez, del belga Michel Collon y Terrorismo mediático. La construcción social del miedo en méxico, del uruguayo Carlos Fazio.
AVN
