El comandante Hugo Chávez le dio importancia determinante al factor comunicacional desde sus inicios como candidato a la Presidencia, resaltó este lunes el periodista Francisco Solórzano, Frasso.
Durante su participación en el programa Entre Todos, que transmite Venezolana de Televisión, con motivo del 60 aniversario del líder de la Revolución Bolivariana, el reportero gráfico destacó: «Chávez era en cada movimiento y en cada gesto una fotografía».
Al relatar sus anécdotas con el líder de la Revolución Bolivariana, Frasso recordó que celebró muchos cumpleaños con Chávez. «Aquí, allá, donde nos tocaba. En el llano, en los Andes, en plena campaña».
El Comandante estaba pendiente de todos los detalles, comentó. «Una vez le cantaron el cumpleaños y yo estaba aquí en el canal y le dije al aire que me mandara un pedazo de torta, y me respondió: «Mira que tú eres diabético». Entonces, cosas como esas eran particulares de él, de Chávez».
Para el periodista, que acompañó con su cámara fotográfica al Comandante desde sus inicios en la política, Chávez era un ser humano especial. «Era ese hombre, ese ser humano especial, con algo que lo hacía tan auténtico, tan espontáneo y todo lo que hacía o decía le quedaba bien».
Frasso relató una anécdota que vivió durante la campaña para las elecciones presidenciales de 1998. «Estábamos por el llano y él quería comerse una arepa y se quería bajar del carro en el que viajábamos. Nos dijo: «párense aquí». Y nosotros vimos cómo la gente lo apabulló y le tomaban fotos».
«Yo iba captando con el lente todas esas imágenes. Y ese día yo pensé: este hombre va para un jonrón», contó el fotógrafo.
Resaltó: «Chávez se fue convirtiendo en el hombre fotogénico, que desde un gesto te decía lo que sentía».
«En una oportunidad me llamó y me dijo: «deberías regalarme unas cuantas fotos de esas que tú me tomas». Algunas de esas fotografías las veo en libros, en revistas, por la calle», manifestó.
Destacó: «La sonrisa de Chávez al momento de una fotografía nos da ese Chávez que está inmortalizado en la cara de los niños, en la gente y en nuestros corazones».
AVN
