Palacio de Miraflores, Caracas. El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, advirtió este domingo, ante la clase obrera, y en un mensaje difundido en cadena nacional de radio y televisión, que sectores opositores fraguan un plan conspirativo para quebrantar la voluntad del pueblo por la vía de la violencia.
«Hay un plan para conjugar desórdenes y violencia», anunció el jefe de Estado en las afueras del Palacio de Miraflores, punto de llegada de la marcha por el Día Internacional del Trabajador, fecha en la que ni la lluvia amilanó a los miles de trabajadores que recorrieron el centro-oeste de Caracas.
Reiteró la denuncia de planes de magnicidios: «Hay planes para acabar con mi vida… Yo sueño con llegar a los 100 años y lo voy a lograr», expresó el mandatario.
Comentó que en ocasiones se exime de informar los resultados del trabajo de los cuerpos de inteligencia para no alterar a la ciudadanía, pero hoy quiso explicar la razón del cambio de última hora del punto final de la marcha de los trabajadores, previsto para la plaza O´leary.
«Tenemos varias decenas de detenidos. Detuvimos a una gente tomando las alturas de un edificio en la plaza O´leary, con intenciones insospechadas, por eso decidí anoche venir [la marcha] a Miraflores, además, es nuestro lugar».
La oligarquía y el imperialismo están desesperados: «Yo sé que no lo podrán hacer, pero si quieres ganar la paz prepararte para ganarla (…) Queremos la paz, amamos la paz, preparémonos entonces. Si como producto de la guerra económica, ellos provocaran eventos por una vía o por la otra, nosotros, empezando por mí, me declararía en rebelión y me iría a la lucha en las calles, en las catacumbas del pueblo», aseguró.
Por Marynés Ladera
