En el torneo, el tricolor nacional fue representado por los jugadores Pedro Brito, Michael Flores, Jorge Díaz y Deivi Añanguren, quien ganó la competencia de clavadas realizadas en ese mismo torneo.
Flores, tras arribar al país, expresó «pusimos la bandera del país en lo más alto. Luchamos contra todos y las cosas salieron bien. Además, tenemos al campeón mundial de clavadas, Deivi Añanguren. Estoy muy contento y orgulloso».
Añanguren obtuvo el mejor puntaje en el concurso de clavadas, a pesar de competir con jugadores que lo superaban en estatura.
«El representante de Estados Unidos era el favorito para llevarse el trofeo. Yo era uno de los más pequeños pero igual logré la mejor puntuación. Esta experiencia ha sido muy linda y estoy agradecido con mis compañeros que siempre me animaron» indicó Añanguren.
Por su parte, Jorge Díaz destacó el nivel de los contrarios en el mundial y la capacidad para salir adelante que tienen los venezolanos en situaciones difíciles.
«En el torneo habían jugadores de mucha envergadura, jugadores de más de dos metros y otros que jugaban en la NBA, pero nosotros tenemos mucha garra y alcanzamos ese octavo lugar. Nosotros como todos los venezolanos sacamos la casta en los momentos difíciles y superamos etapas que parecían imposibles», contó.
Asimismo, Pedro Brito elogió el buen desempeño de las otras selecciones y la dificultad de cada uno de los partidos que disputaron.
«Todos los juegos fueron duros. Nos tocó Francia que fue subcampeón y Ucrania que quedó de tercero. Nosotros siempre empezábamos ganando pero nos pegaba el cansancio y la falta de experiencia. Esos equipos tienen años jugando juntos este tipo de torneos a nivel europeo, y para nosotros era la primera vez», señaló Brito.
Venezuela en la fase de grupos quedó ubicada en el cuarto puesto del Grupo C, al registrar dos victorias (ante Guam 21-9 y México 21-18), y tres derrotas (Francia 12-16, Ucrania 11-14 y Argentina 17-22).
En los octavos de final, la Vinotinto sorprendió a Eslovenia (21-13), conjunto que marchaba invicto en el torneo y había clasificado como líder de su grupo.
En cuartos los criollos no no pudieron contra Israel (11-21), pero quedaron ubicados entre los ocho mejores del planeta.
«Algo que se dice fácil, pero que tomando en cuenta que fuimos invitados a última hora y nunca habíamos jugado juntos en esta modalidad, significa bastante», expresó Pedro Brito.
AVN
