(Palacio de Miraflores, Caracas) Este jueves inició operaciones la Unidad de Propiedad Socialista Agroindustrial Luisa Cáceres de Arismendi, un complejo agroindustrial que se dedicará al procesamiento de sardinas en el Morro de Puerto Santo, estado Sucre, en el oriente del país.
Mediante un pase vía satélite desde el Consejo de Ministros extraordinario que este jueves encabezó el presidente de la República, Hugo Chávez, la nación pudo ver la apertura de esta gran planta que procesará 8 mil 400 toneladas de sardinas al año.
Tendrá capacidad para procesar 24 por ciento de toda la producción de sardinas del país, además procesará otros rubros importantes de la pesca artesanal, con lo cual le ofrecerá alternativas a los venezolanas en épocas de poca pesca. Así lo explicó en cadena de radio y televisión Henry Silva, presidente de la Corporación Venezolana de Alimentos.
Liliana Tinedo, una de las trabajadoras del complejo agroindustrial, explicó en detalle las fases de trabajo que se cumplen en este centro, donde se muestra el modelo económico productivo que ha venido promoviendo el Gobierno Bolivariano para trascender el modelo rentístico petrolero.
La sardina se concentra en forma de cardumen desde el golfo de Santa Fe hasta la península de Paria, especialmente en el interior del golfo de Cariaco, costas de la península de Araya y alrededores de las islas de Margarita y Coche. La captura de sardinas y la recuperación de la industria pesquera en general ha venido mejorando tras la soberana decisión del Gobierno Bolivariano de eliminar la pesca de arrastre, en 2008.
Esa medida la complementó el Estado venezolano al favorecer el equipamiento, tecnología y organización de los pescadores y pescadoras. La producción del complejo agroindustrial sardinero será llevada a la red de distribución de alimentos, con lo cual se frena la especulación.
Elías Jaua, vicepresidente de la República y ministro de Agricultura y Tierras, indicó que para el último trimestre se inaugurarán ocho complejos agroindustriales parecidos, tanto en costas marítimas como fluviales.
Por Marynés Ladera
