Juan Manuel Cajigal fue un estudioso venezolano en el siglo XIX. Fundó y dirigió la Academia Militar de Matemáticas de Caracas y el Observatorio Astronómico de Caracas, que instaló los primeros telescopios del país. El asteroide 12359 fue bautizado como “Cajigal”. La hora legal de Venezuela es determinada por el Observatorio Astrológico y Meteorológico de Caracas “Juan Manuel Cajigal”, de la Armada de Venezuela.
Juan Manuel Cagigal (Cajigal) y Odoardo nació el 10 de agosto de 1803 en Nueva Barcelona, Capitanía General de Venezuela. Entre 1818 y 1823 asistió al Cuerpo de Húsares Montados, en Madrid y al Cuerpo de Ingenieros en la Universidad de Alcalá, en Henares. Entre 1825 y 1827 cursos avanzados con importantes matemáticos y físicos, en el Instituto de Francia en París. Hacia finales de la década de los veinte regresó a Venezuela.
En 1838, junto a José García y Fermín Toro, fundaron el periódico “Correo de Caracas”. Estudió los trabajos de Agustín Codazzi, ensayó los procedimientos litográficos de Daguerre, dictó clases de Literatura en la UCV, y exploró la flora nativa que observó en El Ávila. Juan Manuel Cajigal publicó: Curso de astronomía; Memorias sobre integrales entre límites; y, Tratado de mecánica elemental. Además propuso el trazado de la red vial entre los valles de Aragua y el puerto de La Guaira con Caracas.
Servicios al país y muerte
Juan Manuel Cajigal prestó sus servicios al país en los siguientes cargos: Juez de imprenta; Director de Instrucción Pública; Diputado por Caracas y Senador por la Provincia de Barcelona, ante el Congreso Nacional. Además fue miembro fundador, secretario de correspondencia, y presidente de la Comisión de Artes y Oficios de la Sociedad Económica de Amigos del País.
Entre 1841 y 1843 se desempeñó como funcionario del Gobierno de Venezuela, en varios países europeos. Sin embargo el exceso de trabajo afectó su salud mental, por lo que requirió regresar a su tierra. Juan Manuel Cajigal murió el 10 de febrero de 1865 en Yaguarapo, estado Sucre. Se dice que sus restos fueron enterrados en Río Caribe y luego traslados a la iglesia San Juan de Dios, en La Guaira. Sin embargo, en 1889 tras el decretó de elevación al Panteón Nacional, sus restos no fueron hallados.
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