Recordar es celebrar porque hace tres años el fútbol de Venezuela vivió un hecho histórico y sin precedentes. La Vinotinto se impuso a Uruguay (4-3) en la tanda de penales, tras empatar a uno en los 120 minutos disputados, y consiguió la clasificación a la final del Mundial Sub-20 de Corea del Sur de 2017.
La Agencia Venezolana de Noticias (AVN) señala que el combinado nacional, nuevamente como en las instancias anteriores del certamen, apeló al tiempo extra para poder batir a su rival, pero esta vez tuvo que llegar a la tanda de penales para poder doblegar a sus adversarios.
El mediocampista Samuel Sosa anotó el gol del empate sobre el final del encuentro y expresó al equipo de prensa de la Federación Venezolana de Fútbol (FVF) lo que significó para él dicho partido:
«Ha sido un momento único y ha sido lo más importante que me ha pasado en mi vida. Hicimos un buen partido y estuvimos muy concentrados, y gracias a Dios pudimos darle esa alegría a Venezuela», manifestó Sosa, en aquella oportunidad.
Cuando corría el tiempo añadido por el árbitro principal, la Vinotinto se disponía a cobrar la que podía ser su última oportunidad de empatar el partido y que terminó siendo uno de los goles más celebrados por todo el pueblo venezolano.
«Yo me coloqué al lado de él para acompañarlo. Nunca pensé que iba a patear yo y al último suspiro Peñaranda (Adalberto) me dijo que cobrara. Cobré y pude hacer ese gol. Ha sido el gol más importante de mi carrera y gracias a Dios con él pudimos alcanzar la victoria ante Uruguay», afirmó el mediocampista criollo.
En la tanda de penales Sosa volvió a tener la responsabilidad de cobrar y cumplió. Las atajadas de Faríñez y los buenos cobros de los jugadores criollos llevaron al combinado nacional a ser uno de los finalistas del Mundial Sub-20 de Corea del Sur.
Prensa Digital MIppCI / AVN / Foto referencial Redes Sociales
