(Palacio de Miraflores, Caracas)El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Hugo Chávez, lamentó este jueves el fallecimiento del brasileño Oscar Niemeyer, hecho ocurrido este miércoles, diez días antes de cumplir 105 años de edad.
Mediante un comunicado, el líder bolivariano expresa, a nombre del pueblo venezolano, el dolor por la partida de este hombre de quien destaca su compromiso con los pobres de la Tierra y con la justicia social, virtudes que asegura son más firmes que «el concreto con que dibujó el rostro de Brasilia».
El Gobierno brasileño decretó tres días de duelo y el Mercado Común del Sur (Mercosur) le ha declarado ciudadano ilustre post mórtem, luego de que la delegación de Venezuela presentara esta propuesta que de inmediato fue respaldada por Uruguay, Brasil y Argentina.
A continuación el comunicado oficial emitido por la Presidencia de la República Bolivariana de Venezuela:
PRESIDENCIA DE LA REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
COMUNICADO
El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, comandante Hugo Chávez, en nombre del Gobierno Bolivariano y del pueblo venezolano, desea expresar su profundo dolor ante la pérdida de un inigualable e insigne camarada, hijo de esta Patria grande, como lo fue Oscar Niemeyer, y manifestar sus condolencias a sus familiares y allegados y a todo el pueblo brasileño. Su compromiso con los pobres de la Tierra y con la justicia social es más firme que el concreto con que dibujó el rostro de Brasilia.
Por eso, con esa misma firmeza, nuestro llamado de hoy no es a afligirnos por su partida, sino a ser seguidores entusiastas del sendero solidario que con su misma alegría nos lleve a fortalecer cada vez más la unidad entre nuestros pueblos. Es con mucha emoción que iniciaremos, bajo el cálido abrigo de los frutos de su creatividad, la primera Cumbre del Mercosur donde Venezuela participa como miembro pleno, dando así un paso firme para la unidad que tanto anheló nuestro compañero Niemeyer. Ojalá vivamos a la altura de sus ideales y de su consecuencia, para hacer de sus virtudes y sus convicciones revolucionarias el signo de este nuevo amanecer latinoamericano. Amigo querido, eterno camarada, en la curva que dibujaste siempre podremos encontrar la rectitud de tus propósitos y recordaremos tus sencillos pero gigantescos anhelos: «Ser simple, crear un mundo igualitario para todos, mirar a las personas con optimismo. Yo no quiero nada más allá de la felicidad general».
La Habana, 6 de diciembre de 2012
