El presidente de Rusia, Vladimir Putin, consideró este jueves que la posible activación de un escudo de defensa antimisiles (DAM, por sus siglas en inglés) estadounidense en territorio europeo podría reactivar la carrera armamentista en el mundo.
“Es un sistema de defensa antimisiles puramente estadounidense y además estratégico, sacado a la periferia en la parte europea (…) al cual los europeos tampoco tienen acceso, ni a la determinación de amenazas ni al control”, señaló Putin, citado por Russia Today (RT).
El mandatario ruso señaló que el tema del escudo antimisil es una de las cuestiones más complicadas en la relación de Moscú con Washington.
Reiteró que la instalación del DAM “afectaría los intereses vitales de la Federación de Rusia”.
Putin manifestó que el proyecto estadounidense supone “esencialmente, la aspiración de romper el equilibrio estratégico, algo muy peligroso que puede dar lugar a una nueva carrera armamentista, ya que cualquiera de las otras partes tratará de garantizar su capacidad defensiva”.
Por esta razón, el presidente ruso planteó que para solucionar este diferendo y poder alcanzar un acuerdo en su instalación, Estados Unidos “debe aceptar que ambas partes tengan un acceso equitativo al manejo del sistema”.
“Se trata de un tipo de colaboración para la que Estados Unidos, posiblemente, no está preparado”, dijo.
El plan de acción militar estadounidense en Europa incluyen emplazar complejos de cohetes antiaéreos Patriot PAC-3 y un complejo terrestre Aegis con misiles SM-3 Block IIA en Polonia; una estación de radares AN/TPY-2 en Turquía; y un complejo terrestre Aegis con misiles SM-3 IB en Rumania.
Según Washington, el escudo antimisil, que entrará en funcionamiento en 2017 o 2018, tiene por objeto desviar las posibles amenazas iraníes.
AVN / MinCI
