Al menos cinco personas, cuatro de ellas médicos, perdieron la vida este martes en Kabul, después de que una bomba colocada a la orilla de la carretera estallara al paso de su vehículo.
Las fuerzas policiales informaron que el personal médico trabajaba en la prisión de Puli Charkhi, la principal de Kabul, y en el momento de la explosión se trasladaban hacia su oficina en el barrio de Doghabad.
De acuerdo con el portavoz del jefe de policía de la capital afgana, Ferdaws Faramarz, además de los fallecidos, otras dos personas resultaron heridas en el ataque, que también causó daños en edificios y establecimientos comerciales cercanos, reseña Prensa Latina (PL).
Hasta ahora, ninguna persona u organización ha reclamado la autoría del ataque, pero las autoridades apuntan hacia el grupo extremista Estado Islámico, que ha reivindicado varios ataques en Kabul en los últimos meses.
La violencia en Afganistán se ha disparado a pesar de las negociaciones que desde septiembre pasado tienen lugar entre el Talibán y el gobierno afgano en Doha, Qatar, para buscar un acuerdo de paz que ponga fin a décadas de guerra.
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