Desde hace año y medio, los ciclistas ecuatorianos Mario y César Villegas emprendieron un viaje ambicioso que los ha llevado a una gran travesía por Suramérica.
Con el sueño de escribir un libro al término de su itinerario, estos amantes de la aventura partieron de su natal Ecuador con 30 dólares en los bolsillos, cámaras fotográficas y agendas para registrar cada momento vivido.
La meta es recorrer diez países y actualmente llevan nueve. Su primera parada fue en Perú, después arribaron a Bolivia, Chile fue el siguiente destino, y para subir hacia Argentina debieron ir hasta la Tierra del Fuego en la Patagonia.
El siguiente país en su ruta fue Uruguay, de ahí continuaron pedaleando para llegar a Paraguay y abrirse paso por Brasil. Luego de su recorrido por la tierra de la samba, cruzaron la frontera de Venezuela. Llegaron a Ciudad Guayana y siguieron su paso hasta Caracas.
«Somos amantes del ciclismo; conocer la diversidad paisajística y cultural de cada país fue lo que nos motivó a salir de nuestra frontera», dijo Mario Villegas a la Agencia Venezolana de Noticias durante una entrevista este martes en la sede de la embajada ecuatoriana.
Alojados en Caracas, buscan renovar fuerzas para continuar con el viaje hacia Colombia y finalmente desembocar en Quito, luego de más de 443 días sobre sus caballos de hierro.
Este proyecto de cicloturismo nació de la amplia visión de Mario, quien recorrió las 24 provincias de su país para dar vida a su primer libro «Ecuador visto desde una bicicleta».
Esta obra describe los lugares más populares y también más inhóspitos de Ecuador, y muestra en fotografías muchas cosas que despertaron su asombro y admiración. «La bicicleta nos permite conocer paso a paso, kilómetro a kilómetro, todo con más calma», expresó.
Uno de los propósitos de este nuevo viaje por toda América Latina es crear un nuevo libro, que aunque todavía no tiene nombre, pretende describir de modo particular cada nación que visitan.
«Pienso que eso ayudará de alguna forma a la integración latinoamericana, porque muchas veces se habla de unión entre las naciones y ni siquiera las conocen. Queremos mostrar lo hermosa que es nuestra gente suramericana», precisó.
Montados sobre dos ruedas y sin una dieta estricta de alimentación, los hermanos Villegas han superado cuatro resfriados, algunas infecciones estomacales, una mordedura de perro y una batalla contra la amigdalitis, «pero eso no nos ha limitado y gracias a Dios no ha pasado a mayores».
Esta iniciativa tiene por lema: Sudamérica en bici, por un mundo que soñamos y «en cada ciudad o pueblito, dictamos charlas motivacionales donde nuestro mensaje es que todo es posible. A veces nos ponemos limitantes para lograr un objetivo, y aunque para muchos este recorrido puede ser imposible, nosotros creemos que no y lo estamos haciendo», acotó Mario.
«Lo único que se necesita es la voluntad, la decisión y el coraje para lograrlo, porque uno puede tener muchas ideas pero hay que atreverse a hacerlas», puntualizó.
La travesía de estos hombres les ha permitido llegar más a fondo de lo que un libro tradicional de historia o geografía permite, cada impresión queda registrada en sus agendas, en las fotografías o en los videos que suben a su página web www.biciecuador.com.
Planificar esta aventura tardó tres años, pero una vez que la emprendieron nació un nuevo anhelo: la sed por obtener nuevas historias, destacó César.
«Llevamos 22 mil kilómetros; ha sido difícil pero muy bonito a la vez ver la gente, la cultura, la tradición, las montañas, hasta las piedras, una experiencia inolvidable para nosotros», manifestó.
Los pedalistas estiman que les tomará aproximadamente 5 mil kilómetros hasta Quito, por lo que su recorrido registrará cerca de los 27 o 28 mil kilómetros entre los 10 países.
Ya que los ciclistas salieron de su país con 30 dólares para toda la travesía, a lo largo de su faena han pedido ayuda a alcaldías o gobernaciones para poder costear sus hospedajes y alimentación.
«Hemos estado en más de 20 hoteles hasta hoy. La gente nos apoya apenas les hablamos del proyecto, hasta nos ofrecen sus casas para quedarnos, porque les gusta, e incluso hemos dictado charlas y conferencias de motivación en escuelas», comentó Mario.
También reciben patrocinio de varias empresas ecuatorianas como Dankorp, Ger Bikes, Mallku Expedition, Digio Equipo Impresor, y Cotopaxi, para poder divulgar su visión integradora a través del ciclismo.
Estas empresas diseñan franelas, vasos, muñequeras, gorras y postales de cada viaje que los hermanos ecuatorianos realizan bajo el eslogan: Sudamérica en Bici, por un mundo que soñamos.
Durante su estadía en la capital venezolana, Mario y César Villegas recibieron «la alegría de la gente, una bienvenida cálida y de Venezuela en sí nos llevamos sus hermosos paisajes».
Los ciclistas se marcharán de Caracas el próximo jueves rumbo al estado Miranda, para continuar pedaleando hacia Valencia, Mérida y Táchira, por donde entrarán a suelo neogranadino.
Viajar por Suramérica en bicicleta puede parecer algo imposible e inalcanzable, pero estos dos ecuatorianos han hecho realidad su sueño y cada día se acercan más hacia un Quito que los espera con los brazos abiertos.
«Pueblo venezolano, quiero decirte que por más difícil que parezca un proyecto hay que intentarlo, y así como nosotros salimos de nuestro país con poco dinero, sin conocer a nadie en las otras naciones hay que aventurarse, porque son experiencias de vida que después sirven para contarlas», concluyó César.
AVN
