La Asamblea Nacional (AN) está jugando con la vida de nuestro pueblo, con sus acciones de sabotaje e impedimentos contra la gestión del presidente de la República, Nicolás Maduro Moros.
Así lo definió la dirigente socialista Blanca Eekhout en calidad de vicepresidenta de los movimientos sociales del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) y vocera principal del Gran Polo Patriótico (GPP), durante la multitudinaria marcha nacional en respaldo al proceso de paz e independencia que libra el mandatario nacional, y que tuvo como punto de encuentro la Plaza Bolívar de Caracas.
Eekhout afirmó que “la AN trata de impedir que Nicolás Maduro libre la batalla para salvar a nuestro pueblo. Ellos están jugando con la vida de nuestro pueblo”.
La dirigente revolucionaria aseguró que la directiva de la AN, liderada por la derecha, está proponiendo abiertamente una plan de “guerra y destrucción” para el país.
“La estrategia de la derecha fascista es tratar de dividirnos, y por toda las vías buscan quebrantar la moral del pueblo, sembrar la desesperanza, la duda, el miedo; pero la repuesta de los hijos de Chávez es y ha sido mantenernos unidos, organizados, movilizados y conscientes en la defensa de la Patria”, sostuvo la dirigente.
En ese sentido insistió en que debe privar la unión revolucionaria; por ello afirmó que “podemos tener diferencias, pero tenemos un solo objetivo: defender la Revolución”, y refirió como fundamental la unión del pueblo como divisa para continuar el legado socialista: “Unidad para tener Patria para siempre”, agregó.
Añadió: “Frente a esa unidad revolucionaria, hoy más fortalecida, las embestidas de la derecha nacional e internacional apuestan por la división de las fuerzas revolucionarias y chavistas”.
ATAQUES DE FUERA Y ADENTRO
Eekhout fue enfática al señalar que “la estrategia del imperio ha sido tratar de dividirnos, quebrar la moral del pueblo”, mientras recordaba en su discurso que, detrás de la solicitud para activar la Carta Democrática de la Organización de Estados Americanos (OEA) sobre Venezuela, por parte de la cara visible de Luis Almagro, subyacen los intereses del inmoral Gobierno estadounidense.
Recordó que desde el mismo nacimiento de la Revolución Bolivariana, en 1999 Venezuela y su pueblo se convirtieron en blanco de ataque y de agresión por parte de los poderes imperiales y alertó sobre las pretensiones de Barack Obama de desarrollar un plan para invadir Venezuela.
AN ILEGAL
Por su parte, el coordinador nacional del partido político Podemos, Didalco Bolívar, aseguró que esta AN, de mayoría momentánea derechista, ha actuado al margen de las leyes y del marco constitucional, por lo que “debe cambiarse”.
“Esta Asamblea se ha declarado al margen de la Constitución; es una Asamblea Nacional que debe ser disuelta, los mecanismos existen”, expuso el dirigente.
Mientras agradecía la respuesta de pueblo presente en la marcha, anunció que esta concentración nacional marcaría el inicio de un ciclo de marchas en todos los municipios del país que se darán a partir de la próxima semana, porque se está sembrando el sentido antiinjerencista, antiimperial y de exaltación de los valores de la libertad y la independencia, que solo son posibles si prevalece la Revolución Bolivariana.
REVOLUCIÓN EN PAZ
Por su parte el jefe de Gobierno del Distrito Capital, Daniel Aponte, coincidió con la dirigente Blanca Eekhout y dijo que la coalición de partidos políticos y movimientos sociales izquierdistas de Venezuela que apoyan la Revolución se mantendrán unidos para defender y fortalecer este proceso político.
Indicó Aponte que uno de los legados más preciados que sembró el Comandante Chávez en su pueblo revolucionario fue la exaltación del valor de la paz y el respeto a la vida en libertad.
“Somos amantes de la paz y somos defensores de la Patria; somos dignos defensores del pueblo, y como chavistas nos mantenemos de pie para defender la Revolución Bolivariana”.
MULTITUDINARIO APOYO
Sin distingo de edades, cargos, posiciones ni distancias geográficas, la coalición mostrada en el acto de ayer en apoyo al presidente Nicolás Maduro, deja claro que más de 20 partidos políticos y movimientos sociales se manifiestan para encaminar esfuerzos en defensa de la soberanía de la Patria y en la construcción del socialismo, cuya consigna es la paz.
Esto se desprende de la lectura de un documento firmado por las fuerzas revolucionarias a cargo de José Tomás Pinto, líder del Movimiento Tupamaro de Venezuela.
Dejaron claro su manifestación de apoyo inquebrantable a la Revolución Bolivariana y al gobierno de Maduro como garantía de los derechos irrenunciables de la nación: independencia, soberanía, integridad territorial, autodeterminación y cero injerencias.
“Reafirmamos el compromiso de defender la Revolución Bolivariana en todos los escenarios y defender al presidente Nicolás Maduro y al pueblo de Venezuela”, manifestó Pinto durante el multitudinario acto realizado en la Plaza Bolívar de Caracas.
DEFENDER MÁS DE 17 AÑOS DE LOGROS
Los dirigentes del partido socialista fundado por Lina Ron, Unión Popular Venezolana, en las personas de Carmelo González, Juan Arroyo y Gerson Pérez, dejaron constancia de su sentido de defensa de más de 17 años de logros sociales y millones de ciudadanos beneficiados que no se pueden obviar.
En tal sentido, Carmelo González expuso que con sentimiento nacionalista, antiimperial y de carácter libertario y de reivindicación de los derechos políticos, sociales y económicos de un pueblo, que a través de múltiples procesos electorales ha decidido darse un sistema socialista que está en plena formación, cuenta con los sacrificios de todos, unidos en lucha constante contra los intereses de la derecha nacional y foránea.
González coincidió con el jefe de GDC, Daniel Aponte, al afirmar que “estamos dejando constancia de que Venezuela no es ni será patio trasero ni colonia de nadie”.
La contundente respuesta del público presente en la concentración, que se formó luego de la marcha desde la plaza Morelos, con aplausos, consignas y volantes alegóricos a la herencia de Chávez, indica la aprobación popular mayoritaria hacia la gestión de Maduro.
Ciudad CCS
