El «Por Ahora» de Chávez que se convirtió en el «Para Siempre» del pueblo

Palacio de Miraflores, Caracas. El 4 de febrero de 1992 es una fecha que quedó grabada en la memoria de los venezolanos, porque se convirtió en el día que Venezuela enrumbó su camino hacia la refundación de la Patria y se transformó en un ícono de lucha heroica, ya que el Comandante Supremo Hugo Chávez, líder de la insurrección civicomilitar, asumió la responsabilidad y dejó abiertas las puertas para la construcción de la Revolución Bolivariana.

Esta rebelión, denominada Operación Zamora, que se ejecutó desde horas de la madrugada del 4 de febrero de 1992, en los estados Aragua, Carabobo, Miranda, Zulia y el Distrito Federal (actual Distrito Capital), a pesar de no alcanzar los objetivos planteados a nivel nacional, encendió en el pueblo una llamarada y lo hizo despertar ante la corrupción e indolencia, de una burguesía que no gobernaba para el bien de la Patria sino para sus propios intereses. Esa burguesía es la misma que hoy pretende sumergir al pueblo en la oscuridad de donde salió para siempre.

Tal como manifestó el líder de la Revolución Bolivariana, Hugo Chávez, el 4 de febrero de 2005: «La Rebelión del 4 de Febrero (de 1992) era una necesidad histórica, Venezuela no tenía salida, había que sacudir la Patria, solo por la vía de la Revolución podíamos salir del abismo en el que estábamos», producto de las políticas neoliberales del gobierno del expresidente Carlos Andrés Pérez.

Entre varios escritos y filmaciones sobre el 4 de febrero de 1992, destaca la película Amaneció de Golpe, la cual encaja perfectamente con los sucesos acaecidos en la fecha, porque fue una acción que se inició el 3 de febrero y se extendió por horas hasta llegar al 4 de febrero, para devolverle la dignidad y los derechos a un pueblo que por 40 años fueron maltratados, humillados y masacrados sin compasión.

A pesar de la dignidad, la entrega, la lucha y la pasión de los soldados venezolanos, la meta no fue alcanzada y ante el panorama, el Comandante Chávez asumió la responsabilidad e hizo un llamado a deponer las armas, evitar más derramamiento de sangre y a esperar el enrumbamiento de la Patria por caminos mejores.

En el mensaje que dirigió a la nación expresó: «Este mensaje Bolivariano va dirigido a los valientes soldados que se encuentran en el Regimiento de Paracaidista de Aragua y en la Brigada Blindada de Valencia: Compañeros, lamentablemente, Por Ahora los objetivos que nos planteamos no fueron logrados en la ciudad capital, es decir, nosotros acá en Caracas no logramos controlar el poder, ustedes lo hicieron muy bien por allá, pero ya es tiempo de evitar más derramamiento de sangre, ya es tiempo de reflexionar y vendrán nuevas situaciones y el país tiene que enrumbarse, definitivamente, hacia un destino mejor».

El Por Ahora se convirtió en un hito de la historia de Venezuela y en la esperanza del pueblo venezolano de escribir una nueva historia, verdaderamente revolucionaria, distinta al sistema neoliberal que imperó en el país con AD y Copei, alternándose en el poder.
Cuatro años más tarde, el Por Ahora se transformó en el sueño cumplido, en la refundación de la Patria y en el camino que se trazó el país para ser libre y soberano para siempre, porque el 6 de diciembre de 1998 se celebraron elecciones presidenciales en Venezuela, en las que el pueblo eligió a Hugo Chávez, quien obtuvo 56.20% de los votos, superando con un amplio margen a sus contendores: Henrique Salas Römer (39,97%) e Irene Sáez (2,82%).

Durante su investidura, el 2 de febrero de 1999, el Gigante Chávez manifestó: «Juro delante de Dios, juro delante de la Patria, juro delante de mi pueblo, que sobre esta moribunda Constitución [de 1961] impulsaré las transformaciones democráticas necesarias para que la República nueva tenga una Carta Magna adecuada a los nuevos tiempos. Lo juro».

Desde ese día, 2 de febrero de 1999 hasta el 5 de marzo de 2013, el Comandante Supremo Hugo Chávez cumplió su palabra empeñada: Se construyó la V República, se hizo la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y siempre gobernó para el pueblo y no para intereses burgueses o imperiales.

Durante la conmemoración de los 19 años de 4 de Febrero en el 2011, el líder supremo Hugo Chávez aseveró: «Si no hubiera ocurrido el 4 de Febrero, nosotros no estaríamos acá. El 4 de Febrero es el padre de la Revolución Bolivariana».

Por esta razón, 24 años de la Rebelión del 4F de 1992, el pueblo patriótico continúa rodilla en tierra y apoyando la Revolución Bolivariana que está siendo conducida por el presidente obrero, Nicolás Maduro, para defender la Patria ante las pretensiones entreguistas de la burguesía.

Venezuela conmemora esta fecha reafirmando: «Hoy es 4F, mañana también será 4F, el 4F no ha terminado, el 4F no terminará jamás, porque el 4F es la Patria misma». #4FRebeliónChavista

«¡Este es un día histórico, un día de dignidad Patria!». Hugo Rafael Chávez Frías. 4 de febrero de 2012

Por Maryuri Varela

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