Palacio de Miraflores, Caracas.- El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, informó este lunes que un venezolano falleció tras el ataque al Teatro Bataclan, en París, ocurrido el pasado viernes en la capital gala.
“Es muy dolorosa la pérdida de un venezolano”, dijo el jefe del Estado, quien informó que otro venezolano permanece en recuperación tras ser herido.
“La canciller Delcy Rodríguez estuvo en París, atendiendo y llevando la solidaridad directa, atendiendo a un venezolano que está herido, lamentablemente falleció otro compatriota venezolano, producto de estos ataques terroristas”, informó el mandatario desde el Puesto de Comando Presidencial, donde este lunes estableció un contacto televisivo para abordar temas de interés nacional y presentar al país el balance de obras de infraestructura y habitacionales.
En una nota de prensa de la Cancillería venezolana se da a conocer que durante su visita a París, la jefa de la diplomacia venezolana se entrevistó con el representante de la Cancillería francesa, Fabrice Dubreuil, quien comunicó que el venezolano Alfredo Reyes resultó ileso; Félix David Salazar Perozo, fue atendido en el hospital Pitié Salpetriere en París y aún se desconoce el paradero de Sven Silva Perugini, quien se encontraba con Reyes y Salazar en el Teatro de Bataclán.
La Canciller Bolivariana también se dirigió al Centro de Atención en Ecole Militairea fin de llevar la solidaridad del presidente Nicolás Maduro y de todo el pueblo de Venezuela a la familia de Sven Silva.
El mismo día de los ataques, el Gobierno Bolivariano emitió un comunicado en el que condenó las acciones terroristas en Francia: «…resulta altamente condenable la pérdida de vidas como consecuencia del odio y la violencia terrorista. Es por ello que la República Bolivariana de Venezuela, al ratificar su compromiso con la paz y el respeto a la vida, como máximos estandartes de su Estado Constitucional de Derecho, reitera su más enérgico rechazo al terrorismo en cualquiera de sus expresiones, sin distinción alguna, ni justificación posible, como una gravísima afrenta a toda la Humanidad»
MLC
