El general en jefe Padrino López, en su discurso de investidura como ministro para la Defensa, destacó que el enriquecimiento doctrinario, logístico y organizacional de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, FANB, proseguirá con la tenacidad y conciencia necesaria, que provienen de la convicción de sus integrantes, y sin ella «la patria dejaría de existir a merced de la más oscuras fuerzas».
Durante la transmisión de mando del ministerio, efectuado en Fuerte Tiuna, en Caracas, Padrino resaltó que Venezuela ha sido el centro de constantes y acelerados cambios que han caracterizado al siglo XXI y que para el sector militar ese empuje «ha sido intenso y constante, con el resultado de la solidez en la defensa militar, y en el orden tecnológico que con todo orgullo hoy puede exhibir Venezuela».
Recalcó que el nuevo compromiso que asume debe avanzar exitosamente entre dos obras de complejidad: seguir al frente del Comando Estratégico Operacional de la FANB, tarea táctica y estratégica, y asumir las riendas del Ministerio del Poder Popular para la Defensa, lo que definió como el emporio tradicional del manejo global administrativo y político del universo militar patrio.
En ese sentido, destacó que la creación del Ceofanb, hace nueve años, representó un cambio sustancial con respecto al Ministerio de la Defensa que existía en el pasado. Así, se respondió a «una verdadera revolución desatada por irresistibles razones históricas en el orden sociopolítico de la nación y en lo más profundo del cuerpo castrense», que permanentemente se sustenta.
«El llamado es el mismo, llevar el desempeño a la cúspide consagrándonos a la defensa de nuestra nación», dijo al referirse a la nueva responsabilidad ante el ministerio, lugar desde el cual seguirá enfrentando las vicisitudes que quieran dañar el proceso revolucionario, como las maniobras de quienes se oponen a verdaderos cambios estructurales.
Para ello, sectores adversos a la transformación del país se han «combinado con las más variadas formas de ataque contra el país, como la guerra económica en sus distintas facetas, entre ellos el contrabando, ingrediente que apunta hacia la ruptura del proyecto de la patria, y el paramilitarismo, como la violencia importada de otras partes del mundo».
En ese sentido, recalcó que el fortalecimiento de la unión cívico-militar «ha sido clave para la concreción de una estrategia nacional que vigoriza y dinamiza la defensa integral de la nación».
Por otra parte, valoró el papel de Carmen Meléndez, a quien sustituye en la cartera de la Defensa, en su labor por impulsar la Misión Negro Primero, programa con el que se reivindicaron los derechos de los efectivos militares. Además, exaltó la figura del obispo castrense monseñor Jośe Sanchez Porras, recientemente fallecido, «hombre de fe y hombre de pueblo, que se ocupó de sembrar en nuestros corazones la herencia de humildad y amor al prójimo valores, profundamente bolivarianos y socialistas».
Padrino López resaltó que poseer las mayores reservas energéticas pone al país en el centro de conflictos geopolítcos de alta intensidad, por lo que se debe mantener el fortalecimiento de la FANB. «El perfeccionamiento es una tarea que no debe conocer pausa ni desvío y debe seguir siendo ejemplar e inconmovible», refirió el ministro, quien indicó que para ello se cuenta con la fuerza que emana de los libertadores, de Simón Bolívar y del legado Hugo Chávez.
AVN
