Consejo Nacional Electoral, Caracas La presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Tibisay Lucena, fue clara y enfática al señalar que el papel del órgano electoral es el de contabilizar votos, no el de calificar a la mayoría como grande o pequeña: «Nuestro trabajo es contabilizar y anunciar quién tiene la mayoría», dijo, mientras agregaba que ahora la discusión pasa al debate político, y que sin duda habla de la sociedad que queremos tener.
Durante la proclamación de Nicolás Maduro como presidente electo de la república, para el período 2013-2019 celebrado en el organismo comicial, exigió respeto hacia el CNE y sobre todo hacia los funcionarios que hacen posible los eventos electorales, comentó que muchos trabajadores tanto de la sede central como en las regiones han sido asediados.
«Los resultados electorales en democracia no son producto del consenso, son producto de voluntades del pueblo, de las electoras y electores, que luego de ser cuantificadas expresan la mayoría», refirió.
Ante el llamado de Henrique Capriles Radonski de un reconteo de votos, la presidenta del CNE consideró que se trata de un intento de volver al sistema manual, «que por décadas vulneró la voluntad del pueblo (…). El pueblo venezolano sabe que el sistema es automatizado. Los votos en Venezuela son datos registrados en la memoria de la máquina, los comprobantes son un recibo».
Explicó que la verificación del sistema a través de los comprobantes se da con un porcentaje estadísticamente muy alto de 54 por ciento, y recordó que en el proceso se hicieron 14 auditorías antes y durante el evento comicial.
Frente al desconocimiento de los resultados por parte del candidato de la oposición dijo: «Esa es su decisión, pero en Venezuela hay un Estado de derecho que debe ser respetado»; manifestó también que dentro de la ley existen los mecanismos para dirimir las diferencias que existan con respecto al proceso electoral y «por lo tanto el candidato debe acudir a las instituciones correspondientes».
Fue muy precisa y enfática al insistir en que si existen elementos que se desee impugnar sobre el proceso, «no serán el acoso, la amenaza o el amedrentamiento los actos para acudir al CNE (…); no serán el acoso y la amenaza las vías para rechazar los actos del Poder Electoral, es la Constitución y la ley la única ruta que respetan los verdaderos demócratas».
Recordó el reconocimiento que el sistema electoral venezolano tiene en el mundo. En la jornada de este 14 de abril se ratificó que Venezuela es campeón de la democracia, es una de las democracias más vivas y vibrantes de América, por tanto se ratifica que acá es posible «expresar posiciones políticas, claramente adversas, haciendo uso del voto sin que la violencia se interponga para dirimir conflictos».
Sin injerencias
«Quiero aprovechar para rechazar las declaraciones del Departamento de Estado de Estados Unidos y la Organización de Estados Americanos (OEA), por las declaraciones injerencistas que desconocen de manera campante el ordenamiento jurídico interno».
Refirió sobre las elecciones celebradas en Estados Unidos en el 2000, en las que resultó electo George W. Bush bajo la sombra de resultados que fueron impugnados en el estado de La Florida por Al Gore, quien, como corresponde —refirió Lucena— acudió al ordenamiento jurídico de su país, la Corte Suprema de La Florida, instituciones que no duda Lucena deben gozar del respeto absoluto de organismos multilaterales o instituciones del Ejecutivo estadounidense.
«Estamos convencidas y convencidos de que en Venezuela se puede debatir en paz, que aun cuando las masas contrastan proyectos políticos, la voluntad de nuestro pueblo, que con voz clara y contundente se expresó ayer, siempre será la paz, y el valor más alto será la capacidad de ver y respetar la opinión del otro», dijo.
Por Marynés Ladera
