Biruaca, estado Apure. “El Tribunal de Inquisición de la OEA (Organización de Estados Americanos) está condenado a fracasar y Almagro (Luis, Secretario General de la OEA) está condenado a la hoguera del desprecio, por traidor a los pueblos de nuestra América y por sumarse a la campaña de intervención de nuestra Patria”.
Así lo aseveró el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, en la Base de Misiones Socialistas Simón Rodríguez, localizada en el municipio Birueca del estado Apure.
Más que un Ministerio de Colonias es un Tribunal de Inquisición, reiteró el mandatario nacional, al precisar que el 3 de abril en una sesión extraordinaria del Consejo Permanente de la OEA, una minoría de gobiernos inquisidores, extremistas e intolerantes de la derecha de América Latina, irrespetando los procedimientos legales de este Organismo Multilateral, han llegado al juicio y a la condena de Venezuela, sin ni siquiera darle el derecho a la defensa.
El fascismo siempre ha venido del Norte por sus complejos racistas, imponiendo las peores formas de represión, recordó.
Ante este panorama, el dignatario venezolano llamó una vez más a la unión cívico-militar y a la movilización nacional para consolidar la paz, y a continuar trabajando en la construcción del Socialismo del Siglo XXI, sin descuidar la seguridad y la defensa nacional.
Unidad que quedó demostrada este 4 de abril con el desbordamiento del pueblo en las calles de Caracas, impidiendo concretar la orden emanada desde el imperialismo norteamericano para plagar de violencia la Patria venezolana y justificar la intervención.
“Desde el Norte le dieron la orden de llenar las calles de violencia. Hoy intentaron de manera fallida, y yo puedo decir: A esta hora triunfó la paz en Caracas con el pueblo, con la unión cívico-militar. ¡Que viva la paz!”.
“Estoy muy feliz porque en medio de esta batalla vamos avanzando”, enfatizó el presidente Maduro
Por Maryuri Varela
