Movimientos sociales en Portugal se preparan para marchar por las principales calles de Lisboa (capital), este sábado, para manifestar el rechazo contra la política de recortes que ha adoptado el gobierno del primer ministro Pedro Passos Coelho.
De acuerdo con el colaborador de teleSUR en Portugal, Jacobo Rivero, “los Movimientos sociales en el país han convocado para manifestarse contra una situación similar a la de Grecia en la capital”.
Rivero añadió que “las calles de Lisboa se ven tranquilas hoy (viernes) sin embargo, los ciudadanos pertenecientes a los principales sindicatos de trabajadores del país están recordando sobre la concentración del sábado”.
Agregó que “el pueblo portugués, en su mayoría, afirman que solo hay dos opciones: emigrar o vivir en precariedad por los recortes. Debemos vernos reflejados en los espejos de lo que ocurre en España y en Grecia, dicen los ciudadanos lusos”.
El primer ministro portugués, Pedro Passos Coelho, que se enfrenta a una creciente oposición social por su política de austeridad, se mostró preocupado por la imagen que podría dar su país en el extranjero, en particular ante sus acreedores.
«Hay problemas que se acumulan a nivel europeo», declaró el jefe del gobierno, de centroderecha, en alusión a la situación en España y en Grecia. «Me gustaría que Portugal no fuese visto del lado de los problemas por solucionar», añadió.
El pasado 15 de septiembre, miles de personas salieron a las calles con gritos y pancartas contra el Gobierno y las medidas neoliberales que ha implementado en sus quince meses. También se observaron multitudinarias movilizaciones en Oporto y otra veintena de ciudades.
Los principales promotores de esta manifestación explicaron que el objetivo de la protesta era el de expresar al Gobierno y los organismos internacionales el descontento de los portugueses por las políticas capitalistas que han aumentado el desempleo en el país a un 15 por ciento, así como también la recesión que alcanza el 3,2 por ciento.
Una de las últimas medidas que ha generado gran polémica es el aumento de la contribución de los trabajadores a la Seguridad Social, del 11 por ciento al 18 por ciento, y una rebaja del 23,75 por ciento al 18 por ciento de la contribución de las empresas.
En los últimos dos años la situación económica en Portugal se ha agravado, manifestándose de diversas formas, entre ellas el aumento del desempleo (superior al 15 por ciento actualmente) y la desigualdad social.
Desde el 2011, más de 100 mil ciudadanos han perdido su trabajo y se pronostica que unas 40 mil personas se sumarán al total de desempleados. El Producto Interno Bruto (PIB) se ha reducido en un 1,6 por ciento y se espera para este 2012 una caída superior al 3 por ciento.
Telesur
