Varias ciudades de Portugal son escenario este sábado de concentraciones masivas en contra de los recortes económicos que se siguen intensificando en el continente. Según los organizadores, las protestas tomarán un cariz festivo y cultural con la participación de numerosos artistas.
Diversas manifestaciones fueron programadas para este sábado en varias ciudades de Portugal en rechazo a las medidas de austeridad y a la intención de reducción del déficit que ha planteado el Gobierno del Primer Ministro, Pedro Passos Coelho.
Enmarcada en la jornada internacional «Global Noise» contra la deuda de los Estados, organizaciones sociales y sindicatos convocaron a las concentraciones para reclamar por el descontento social y el declive financiero.
Se tiene previsto que la movilización inicie en la Plaza de España de Lisboa (capital) y según reportes de medios locales, se transformará a partir de las 16H00 GMT en un escenario de espectáculos culturales.
En Europa, España también se sumará a la protesta, con un concierto de cacerolas pautado aproximadamente a la misma hora.
La iniciativa “Global Noise” busca un cacerolazo internacional contra las desigualdades y la opresión de un sistema injusto que pone al capital por delante de las personas.
A través de varios comunicados y convocatorias en las redes sociales, para este 13 de octubre, bajo el lema “no debemos, no pagamos”, los sindicatos buscan unir luchas diciendo no al pago de una deuda ilegítima, no a los recortes y privatizaciones, no a los privilegios en el pago de impuestos y no a la reforma laboral y el desempleo.
A su vez, insisten en la no especulación con la vivienda, no al rescate de la banca y no a una Unión Europea de los bancos y multinacionales.
Esta semana, el gobierno de Portugal anunció que debido al plan de austeridad unas 50 mil personas contratadas por el Estado perderán sus empleos a lo largo de 2013.
Ante el declive financiero, la población se ha mantenido en constantes protestas que el pasado septiembre llegaron a ser las más masivas de toda la historia de ese país europeo.
El Gobierno portugués se comprometió en reducir sus gastos con el objetivo de alcanzar un déficit del presupuesto de cinco por ciento para el año 2012. Sin embargo, los aumentos de impuestos y la reducción de los gastos no impidieron el incremento del desempleo y el país sigue en recesión.
TeleSUR
