El responsable federal de Política Internacional de Izquierda Unida (IU), Francisco Pérez denunció este lunes que las sanciones contra Venezuela, además de crear graves problemas económicos a su pueblo, son un obstáculo para el establecimiento de una buena relación entre Europa y Latinoamérica.
Estas declaraciones fueron ofrecidas por Pérez, con motivo del inicio de la reunión de cancilleres de la Unión Europea (UE) y de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), celebrada en la ciudad de Bruselas, Bélgica.
El representante de IU, lamentó en un comunicado que la UE contribuya a la aplicación de esas injustas sanciones económicas y, al mismo tiempo, pretenda fomentar acuerdos de cooperación para mejorar los vínculos con la Celac.
Para el dirigente federal de IU, las medidas punitivas contra la República Bolivariana, decididas por el gobierno estadounidense de Donald Trump y respaldadas por la UE, crearon «un auténtico bloqueo económico».
«Suponen un sabotaje económico y una violación de los Derechos Humanos del pueblo de Venezuela, que es quien realmente las sufre», remarcó, tras acusar a la administración de Trump de proponerse derribar al gobierno legítimo y democrático del presidente Nicolás Maduro.
Indicó que esa injerencia del llamado viejo continente perjudicará las relaciones futuras entre los dos mecanismos regionales de integración,«No es posible afirmar en las reuniones de cancilleres que se busca construir las mejores relaciones de cooperación comercial, cultural, científica, tecnológica o respecto al cambio climático y al mismo tiempo, sabotear económicamente a Venezuela», enfatizó.
A su juicio, cada vez hay mayor subordinación de la política exterior de la UE a Estados Unidos, «más que evidente en las sanciones contra Venezuela», amenaza con perjudicar futuros acuerdos de cooperación entre ambas partes.
