El poderoso tifón Rammasun dejó 16 muertos a su paso por el sur de China, además de 3,3 millones de afectados y numerosas pérdidas, de acuerdo con reportes divulgados hoy en esta capital.
Considerado el peor fenómeno de esta naturaleza en los últimos 40 años, el Rammasun barrió decenas de ciudades costeras de las provincias chinas de Guangdong y Hainan, así como de la región autónoma de Guangxi Zhuang.
Hasta anoche se reportaban siete muertos en Hainan y nueve en Guangxi, así como serios daños en los servicios de electricidad y agua, redes de telecomunicaciones, puertos y carreteras, lo que dificultaba los esfuerzos de rescate y ayuda.
Los servicios aéreos fueron reanudados, pero todavía están detenidos los de las conexiones de tren rápido entre Nanjing, capital de la oriental provincia de Jiangsu, con ciudades costeras.
En la provincia-isla de Hainan, en el extremo sur de China, el Gobierno organizó una respuesta de urgencia con seis equipos enviados a los lugares más afectados. Se calcula que 100 mil campesinos de la localidad de Wenchang fueron reubicados.
Más de 100 mil soldados han sido movilizados para ayudar a la reubicación de los pobladores en las zonas de Wenchang, Tunchang y Wanning, adonde fueron enviadas 100 toneladas de materiales de socorro para los damnificados, agregan las fuentes oficiales.
Entretanto, las autoridades meteorológicas anunciaron hoy lluvias torrenciales durante los próximos días en el noreste y norte del país como secuela del tifón y en algunas regiones se pronostican precipitaciones con acumulados de 100 a 150 milímetros.
Prensa Latina /Foto EFE
